Coloquialmente, las expresiones “pérdida de peso” y “pérdida de grasa” suelen utilizarse en contextos similares, pero la cuestión es que no significan lo mismo. Normalmente cuando un paciente con sobrepeso y obesidad busca perder peso lo que en realidad quiere es perder el mayor porcentaje de grasa corporal posible.

Al realizar una de las llamadas “dietas milagro”, se consigue una rápida pérdida de peso que puede provocar deficiencias en la salud. Es recomendable que, al adelgazar, esto proceso se realice de manera progresiva en el tiempo.

Además del peso, se necesita conocer y medir siempre la cantidad de grasa y agua corporal que forma parte del organismo. Aquellos pacientes que practiquen deporte de manera constante sabrán que el músculo pesa más que la grasa, por lo que la disminución de peso no será tan marcada como sucede en otros pacientes. Perderán bastante grasa, sin grandes resultados en la báscula.

Otro dato a tener en cuenta es el gasto energético para poder valorar si su ingesta de alimentos es correcta. Si se realiza una ingesta calórica mayor al gasto energético que requiere la persona, se producirá un aumento de peso (y por lo tanto también de grasa).

Existen muchas técnicas para reducir grasa y peso. Es necesario conocerlas en profundidad para así poder decidir cual es la más apropiada en base a las necesidades y objetivos del propio paciente.

Balón gástrico y liposucción.

Los balones gástricos son procedimientos que se usan cuando el paciente busca bajar de peso. Consiste en introducir un balón en el estómago del paciente que permanecerá allí unos meses (depende del tipo de balón serán 4, 6 o 12 meses). El balón ocupa parte del volumen del estómago, por lo que se reduce la ingesta y aumenta la saciedad, provocando una disminución de peso. Este método es mínimamente invasivo, no es un procedimiento quirúrgico como el Método Apollo o la Manga Gástrica.

Algunos balones requieren que su retirada después de los meses, en cambio otros se eliminan espontáneamente al finalizar el tratamiento (como es el caso del balón Elipse). Este método tiene asociado un cambio en la dieta y estilo de vida del paciente para fomentar que esta pérdida de peso se mantenga. Es una estrategia óptima, segura y muy recomendable en pacientes que busquen adelgazar de manera rápida hasta 15 kilos en solo 4 meses.

La liposucción es la segunda cirugía estética más realizada en Estados Unidos (1). Este procedimiento consiste en eliminar la grasa localizada en áreas no deseadas del cuerpo a través de una cirugía mínimamente invasiva. El fundamento de la técnica es succionar la grasa. Las zonas donde más se suele realizar son el glúteo, abdomen, piernas y espalda. Se lleva a cabo con anestesia local y no requiere hospitalización. No presentan grandes cicatrices y el periodo de recuperación es corto. Esta intervención se suele realizar con un fin estético en el que el paciente busca reducir grasa localizada y moldear su cuerpo. Si el paciente tiene sobrepeso u obesidad y lo que busca es reducir peso, no es un procedimiento recomendado.